Hola soy Kiki, un tomate
genéticamente modificado y les voy a contar mi historia. Hace muchos años en un
pueblo muy muy muy lejano se encontraban mis bisabuelos en una cosecha, cuando
por fin completaron su ciclo y fueron cortados por sus Wobes (que son las
personas que nos crean, que nos siembran, nos cuidan, nos alimentan y al final
nos venden) se dieron que cuenta su apariencia no era la mejor por lo tanto por
este motivo no se vendían con facilidad y rapidez todos los tomates ya que a
los compradores les importaba la apariencia de estos para decidir si los
compraban o no.
Es por esto que se tuvo que
buscar una alternativa para que las ventas aumentaran, fue en 1986 cuando se
creó la primera planta genéticamente modificada, esta fue de la familia de mi
amiga Vira, ella es una planta de tabaco y a sus ancestros se les añadió
a su genoma un gen de resistencia para el antibiótico Kanamicina.
Para que vayan entiendo un poco, los conocidos como
transgénicos son aquellos organismos a los que se ha añadido material genético
externo o extraño para conseguir cambios de forma o de color, o resistencia a
ciertas bacterias o insectos. Esos nuevos genes vienen de otros organismos o
salen de un laboratorio, en otras palabras nosotros fuimos modificados para
mejorar nuestra apariencia algo así como la cirugía plástica en los Wibes
(humanos comunes) por así decirlo solo que a nosotros nos alteraron nuestra genética
y esto provoco el cambio.
Entonces, me contaron mis amigos y conocidos que cuando la
Facultad de Ciencias Biológicas de la Facultad de Ciencias de la Universidad de
Hong Kong empezó a experimentar sobre mis ancestros, lograron crearme a mi,
Kiki un tomate con elevaciones de vitamina E (α-tocoferol, 494%), escualeno
(210%) y fitoesteroles (94%). La verdad cuando me contaron que fui modificada
no me agrado tanto la idea pero al saber que puedo mejorar el valor nutricional
de las comidas y así ayudar a los Wibes que me consumen no me pareció tan cruel
la idea. A pesar que mi ADN fue modificado aun cuando yo soy
diferente a mi tomate madre, mi
perfil metabólico está dentro del rango considerado normal de diversidad
bioquímica exhibida por el grupo más amplio de variedades. Les contaré que aunque
en Nueva Zelanda aún no nos aceptan por nuestra modificación, en Estados
Unidos, Washington y Bruselas ya nos dieron el visto bueno pero acá entre
nos ni tenía ganas de visitar Nueva Zelanda, no entiendo porque aún mucha gente
no nos quiere si ya varios científicos han demostrados que no dañamos el
organismo de los Wibes que nos consumen en los países
donde ya se venden mis hermanos.
Y esta es
mi historia, como gracias a unos Wibes pude nacer con una mejor apariencia,
ayudando a mis Wobes a mejorar sus ventas. Como les dije me siento a gusto
conmigo y me muero de ganas de saber quién será el Wibe que me compré, me
entusiasma mucho saber porque estamos creados para producir beneficios en
ellos, esto es todo por ahora también espero que se vayan con una buena imagen
de mi dado que se me hace muy importante saberlo, luego les contaré si fui
vendida o si pude hacer la diferencia al ser exportada a países donde ya me
puedan aceptar.
Hasta
pronto, nos seguimos leyendo, Kiki.
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